Es sin duda el corte de pelo de toda la vida para cabellos cortos y medios, y que te permite llevar el peinado que quieras en función de la longitud necesaria para hacerlo claro esta, es como una de esas navajas suizas con 40.000 herramientas todo en uno. Se caracteriza por que la parte superior va cortada toda por igual, al igual que las sienes que llevan la misma longitud, pero por debajo de estas suele cortarse un poco más, por tradición, se suele hacer en disminución que es como mejor queda y dicen los cánones clásicos de la peluquería o barbería masculina.
El cuan corto se lo marca tanto el cliente por gusto, como el remolino que todos tenemos en la parte del cogote de nuestra cabeza, y que pide por si mismo una longitud para no levantarse rebelde por cuenta propia. Depende de donde tengamos ese remolino, y de como sea nuestro pelo en sí de rebelde el que nos admita llevarlo más corto o más largo. Eso bien lo sabe ya por experiencia cada cliente con su pelo, pero también nos lo dice el buen y experimentado ojo del barbero.
Este corte de pelo se puede hacer con peine y tijera aplicando un corte clásico, se puede hacer también con máquina cortapelos como un corte moderno, o se puede hacer con navaja. El escoger un método u otro va a depender de tu gusto, y de tu tipo de pelo para que asiente lo mejor posible.
Este es el típico corte que cuando uno entra en la Barbería y no sabe como lo quiere en verdad o no le importa mucho lo pide como “normal” o como “el de toda la vida” esperando que lo corten lo justo, y no demás.